Una jornada reducida, pero intensa, favorece a la mujer

 

El Empleo Noticias
lunes, 11 de diciembre de 2017 8 a. m.

Si es una empleada ejemplar, atrévase a negociar un mejor horario en la empresa.

Tendencias laborales / 19 de junio de 2012

Un trabajo a la medida de la maternidad. Por eso lucha María Paola Scarinci de Delbosco, quien cría ocho hijos con apoyo de su marido y lleva adelante su carrera como profesional. Esta argentina de origen italiano es profesora del Centro Conciliación Empresa y Familia del IAE Business School, la tercera mejor escuela de negocios de América Latina. En su visita a Costa Rica, conversó con El Empleo sobre los retos de las madres profesionales.

¿Cómo conciliar el trabajo con las obligaciones del hogar?

La mujer logró entrar en el mundo del trabajo, pero no ha tenido el coraje de cambiar las reglas del juego; el mundo del trabajo exige una disponibilidad, casi infinita, a la medida del varón.

¿Puede haber un cambio?

Una mujer puede demostrar que genera gran productividad en jornadas de menos de ocho horas. Si hay compromiso de ser eficaz por parte de la mujer, y de recibir apoyo por parte de la empresa, se podrían sacar las tareas en una jornada de menos horas, pero más intensa.

¿Es posible cumplir metas laborales en jornadas más cortas? La decisión va de las dos lados: del lado de la mujer, quien debe poner el corazón en lo que hace, así como del lado de la empresa, que debe comprometerse a no pensar que la mujer está sacando ventaja de ese horario reducido.

¿Cuáles empresas pueden apuntarse a este cambio? Ofrecer horarios concentrados y/o discontinuos es más fácil en empresas innovadoras, que no están sujetas a aspectos muy cronológicos en sus servicios. Por ejemplo, e1 servicio de enfermería no debe trabajar ocho horas, si no seis, atender enfermos es un trabajo muy desgastante. Un cambio de horarios emplearía a más población, es tonto tener a poca gente trabajando muchas horas si hay mucha gente desocupada.

¿Cómo negocio con mi patrono un cambio de jomada? Los factores que permiten negociar con el patrono son capacitación, competencia y eficacia. Si una mujer es independiente, talentosa y creativa en sus labores, el patrono no querrá perder a esa empleada El patrono se volverá más flexible en los horarios para no perder ese talento.

La mujer debe demostrar siempre su capacidad... Si, el factor que nos permite negociar es nuestra capacidad; sino la ponemos en juego entonces vamos a mantener el mismo horario que los varones, pero con las responsabilidades de madres y esposas, las cuales no son acompañadas aún por muchos esposos. La mujer debe animarse a innovar en sus labores porque eso interesa mucho a las empresas, siempre hemos sido creativas.

?Trabajar ocho horas no es siempre una garantía de alta productividad ?, alerto María Scarinci de Delbosco, experta en mujer y trabajo.

La Nación

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