Desde setiembre del 2006 en el país se discutía la posibilidad de actualizar la cobertura del seguro de riesgos del trabajo pero 15 meses después esa iniciativa está lejos de convertirse en realidad.
Una de las principales razones para esa falta de resultados es la definición de las nuevas enfermedades que se adoptarían.
Por un lado, los asegurados piden la inclusión de más dolencias pero la entidad aseguradora objeta algunas de ellas.
En 1982 se establecieron las clasificaciones de impedimentos físicos y las enfermedades originadas por actividades laborales. Desde entonces ha carecido de modificaciones.
Ahora el proyecto de decreto ejecutivo lo tiene la junta directiva del Consejo de Salud Ocupacional (CSO) ?entidad adscrita el Ministerio de Trabajo-, donde todas las partes involucradas se tendrán que poner de acuerdo.
La directiva del CSO es presidida por el viceministro de trabajo, Guillermo Matamoros.
Si un trabajador padece de una enfermedad que no está cubierta debe iniciar un proceso legal y médico ante el INS y una junta debe considerar que es una consecuencia laboral, incluso puede llegar hasta los tribunales.
La actualización de las enfermedades a cubrir por el seguro tiene como base el convenio 194 de la Organización Internacional del Trabajo, que es una clasificación de dolencias por su origen.
Sin avances
Matamoros explicó que la propuesta está en consulta desde inicios del 2007 y que ahora pasarán a replantearla.
Agregó que el papel del Gobierno consistirá en servir como mediador.
El Viceministro explicó que parte del retraso también se debe a que el CSO ha tenido que actualizar varios reglamentos como el de salud ocupacional que tiene 40 años de funcionamiento.
Francisco Soto, jefe de la división médica del INS, confirmó que desde que es representante en el CSO en agosto pasado este tema no se ha discutido en reuniones de junta directiva.
Aunque el INS sigue sin elaborar una contrapropuesta, Soto detalló que algunas de las patologías que estipula la OIT no tienen aplicación en Costa Rica.
Para Soto, antes de proseguir con las negociaciones es mejor tener una aproximación al nuevo costo que tendrán las primas que pagarán los asegurados.
El asesor de desarrollo de capital humano de la Cámara de Industrias, José Salas, afirmó que respaldan la actualización pero se oponen a que el INS dictamine unilateralmente el valor del riesgo que tendría cada sector.
?Sabemos que el precio de las primas subirá, pero que la nueva tarifa responda a un estudio técnico y actuarial?, dijo Salas.
El representante gremial advirtió que en el momento de considerar nuevos riesgos se debe tener en cuenta el tipo de empresas que llegan al país (como los call centers) y los trastornos en la salud de un número creciente de trabajadores.
Sergio Morales
Opine en el debate: ¿Haría usted un reajuste en su horario de trabajo?
Comentarios