Conmemoración del Día Internacional de la Mujer Trabajadora, historia y actualidad

El día 8 de marzo ha sido históricamente la fecha en la que se conmemora el día Internacional de la Mujer Trabajadora, sin embargo, le anteceden muchas luchas para poder celebrarlo hoy día. Como lo fue en 1857 en plena revolución industrial, cuando un grupo de mujeres trabajadoras del área textil, sale a las calles en New York para protestar por las condiciones laborales mínimas que tenían, reclamando por primera vez, la desigualdad salarial frente a los hombres, dando pie a una marcha que cobró la vida de 120 mujeres y aparece así, el primer sindicato de mujeres.

Posteriormente, el 8 de marzo 1910 durante le Segunda Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas en Dinamarca, se declara la celebración del día Internacional de la Mujer Trabajadora, cuyo objetivo principal era promover la igualdad de género, así como derechos de las mujeres en temas de equidad, políticos (derecho al voto), económicos y laborales.

En marzo de 1911 ante el impacto por un incendio en el que murieron más de 130 mujeres trabajadoras en una fábrica de camisas (NY), se produjeron grandes cambios en temas de derecho laboral, introduciendo así normas de seguridad y salud laboral.  Finamente, en 1977 la ONU solicita a los países proclamar dicho día y es así como queda institucionalizado el 8 de marzo, en aras de evocar la lucha de las mujeres por su participación en la sociedad, equidad de oportunidades  y recordar el trabajo por hacer. 

Posteriormente, en 1979 se crea la Convención sobre la Eliminación de toda forma de Discriminación contra la Mujer  (CEDAW), nace ante la preocupación, que a pesar de los instrumentos internacionales de protección en DDHH, las mujeres seguían siendo objeto de discriminación. Interesa al respecto algunos hallazgos y recomendaciones del último informe sobre nuestro país (CEDAW 2017): existencia de limitaciones al acceso a la justicia de las mujeres, necesidad de luchar contra estereotipos, prácticas discriminatorias, violencia de género y así como una deuda en la protección a mujeres indígenas y migrantes.

Respecto a la mujer dentro del ámbito laboral en Costa Rica, si bien existen leyes e instituciones protectoras, en la práctica y de acuerdo con el último Estado de la Nación 2018, existen muchas áreas de mejora ante la desigualdad frente a los hombres. Por ejemplo, si bien la participación laboral femenina ha aumentado, aún permanece 30% por debajo que la del hombre. A su vez, tener un mejor perfil educativo, no se ha traducido en oportunidades laborales para las mujeres y la brecha salarial al 2017, se encuentra en un 12% por debajo del ingreso de los hombres en un mismo puesto e igualdad de condiciones.

Si bien Costa Rica ha tenido avances hacia la equidad desde el punto de vista normativo: Reglamento para el aseguramiento de las trabajadoras domésticas, Ley de la Red Nacional de Cuido, la ampliación  del artículo 404 del Código de Trabajo que prohíbe entre otros, la discriminación por motivos de sexo, discapacidad y cualquier otra forma.  (Fuente: Política Nacional de Igualdad y Equidad de Género (PIEG) INAMU 2017), es necesario que en la práctica todas estas, se materialicen en acciones concretas, para reducir la desigualdad que procurará impulsar la  PIEG para el periodo 2019-2030: impulsar una cultura de derechos para la igualdad, así como trabajar para una real distribución de tiempo, riqueza y poder equitativo.

Por su parte en la corriente Legislativa se encuentran proyectos de Ley que buscan la paridad institucional en Juntas Directivas, puestos públicos y cooperativas, para frenar la violencia intrafamiliar, violencia obstétrica y el acoso sexual callejero, así como la reforma de la ley nº 7142, para la protección de la igualdad salarial entre mujeres y hombres.

Como se puede ver, el camino recorrido ha sido largo y los avances significativos, sin embargo, fechas como estas, deben  hacernos reflexionar y motivarnos a  promover entre empleados y empleadores, no solo el respeto en el trato, sino la igualdad de oportunidades, acceso a puestos de trabajo, concientizar para eliminar la discriminación por género desde el momento de la contratación, así como  sensibilizar de la normativa existente y su debida aplicación dentro de las empresas, tanto a quienes ejercen puestos de dirección, como al personal.

Cindy Sabat

csabat@bdsasesores.com