Si la foto oficial que se tomó el Presidente el 8 de mayo del 2002 con su gabinete se hiciera hoy, tres años después, solo se repetirían ocho caras.
La de Abel Pacheco y las de siete ministros que siguen en el puesto. Ya 12 se fueron.
Más allá del simple cambio de nombres, tras la inestabilidad del equipo de gobierno podría estar una falta de coordinación y claridad de objetivos que ha regido 36 meses de administración.
En criterio del sociólogo Manuel Rojas Bolaños han sido tres años en los que se puede hablar de obras aisladas, propias de la dinámica de un gobierno y sus instituciones, pero no se puede encontrar un plan integral que haya servido como hilo conductor, ?y ya no se encontrará?, agregó.
Las prioridades cambiaron año con año, ?si no es que varias veces al año? y no por cambios en condiciones reales sino por cambios en las propias prioridades o falta de ellas, dijo el economista Leonardo Garnier.
Para el analista Jaime Ordóñez, otro problema de gobernabilidad ha sido la falta de comunicación entre poderes originada en dos causas. Primero la atomización partidaria en el Parlamento.
La otra, la falta de un ministro de la Presidencia permanente como gran negociador de sectores. El actual gobierno ha tenido tres y todos muy diferentes entre sí.?A nivel de fracción yo diría que el contacto con el Ejecutivo ha sido prácticamente nulo en todo este tiempo?, aseguró la actual jefa de fracción de Acción Ciudadana, Marta Zamora.
Según el jefe de la bancada liberacionista, Carlos Ricardo Benavides, luego de tres años de gestión no ha existido un canal efectivo entre el Ejecutivo y Legislativo y si se han acercado a algunos ministros ha sido por iniciativa del PLN.
Casa desordenada
Y si es eso es a nivel de poderes, a lo interno del Gobierno muchos de quienes han dejado sus respectivas carteras lo han hecho tras encontrar falta de apoyo en la defensa de los fines que se les había encomendado al comienzo.
En septiembre del 2004, el entonces ministro de Comercio Exterior, Alberto Trejos, dejó su puesto en parte por el freno que Pacheco puso a la marcha que traía el Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos, uno de los proyectos ?estrella? del que el Mandatario dijo en octubre del 2003: ?Si quedamos fuera, adiós Costa Rica?.En mayo de ese año, Pacheco aseveró que sus prioridades eran el TLC, la reforma fiscal y la reforma al Reglamento Legislativo.
?Cayó en la trampa de poner todos los huevos en una canasta y en temas complejos?, apuntó Rojas Bolaños.
Luego, el plan fiscal se convirtió en casi la única prioridad y aún hoy lo es, a pesar de que el 21 de diciembre del 2003 le dijo a este diario que si este no se concretaba en enero siguiente, lo retiraría del Congreso.
Mientras se lograban avances, la consigna fue la austeridad, pero hubo una excepción que aceleró la salida de otro ministro: Alberto Dent, de Hacienda.
El movimiento sindical logró, el 30 de agosto del 2004, que el Ejecutivo concediera un aumento adicional de 0,5 por ciento a empleados públicos y Dent prefirió irse.
La decisión incluyó otras concesiones a gremios y apagó las protestas callejeras. Y es que precisamente es en problemas muy puntuales en donde, en criterio de Ordóñez, Pacheco ha logrado éxito y no así en los de largo plazo donde hay mucho pendiente.
Ya en julio del 2003 el mandatario había apaciguado los reclamos de sindicalistas del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) y eso le costó la salida del entonces ministro de Ciencia y Tecnología, Rogelio Pardo.
Para el sociólogo Rojas la falta de un proyecto integral de país es el que hizo del Gobierno uno muy susceptible a grupos de presión ya que no tiene un esquema que defender.
A 12 meses del final nadie perfila grandes cambios en el último año, y los menos optimistas, como Garnier, se preguntan: ?¿Qué es lo que querían? ¿Para qué intentaron llegar... y llegaron al gobierno??La pregunta se le plantearía a Pacheco en la entrevista personal que negó a La Nación.
Pero en su discurso del 1.° de mayo Pacheco sostuvo: ?Nos quedan aún 12 meses de trabajo, es tiempo suficiente para hacer mucho por Costa Rica?.
Eduardo E. Alvarado
Comentarios